domingo, 14 de noviembre de 2010

No quiero algo que necesite,quiero algo que quiera.

-No me crees,¿verdad?
-Nunca ha tenido sentido que me quisieras.Siempre lo he sabido.
-Te probaré que estás despierta
-Por favor,no lo hagas.
-¿Por qué no?
-Cuando me despierte..¡Vale,olvídalo! Rectifico: cuando te vayas otra vez,ya va a ser suficientemente duro sin esto.
-Ayer cuando te toqué,estabas tan..vacilante,tan cautelosa.Y todo sigue igual.Necesito saber por qué.¿Acaso ya es demasiado tarde?¿Quizá te he hecho demasiado daño?¿Es porque has cambiado,como yo te pedí que hicieras?Eso sería..bastante justo.No protestaré contra tu decisión.Así que no intentes no herir mis sentimientos,por favor; sólo dime ahora si todavía puedes quererme o no,después de todo lo que te he hecho.¿Puedes?
-¿Qué clase de pregunta idiota es ésa?
-Limitate a contestarla,por favor.
-Lo que siento por ti no cambiará nunca.Claro que te amo y ¡no hay nada que puedas hacer contra eso!
-Es todo lo que necesitaba escuchar.
En ese momento,su boca estuvo sobre la mía y no pude evitarle.No sólo porque era miles de veces más fuerte que yo,sino porque mi voluntad quedó reducida a polvo en cuanto se encontraron nuestros labios.
Se apartó cuando empecé a marearme,sólo para poner su oído contra mi corazón.
Yo me quedé quieta allí,aturdida,esperando que los jadeos se ralentizaran y desaparecieran.
-A propósito,no voy a dejarte.No me voy a ir a ninguna parte.Al menos no sin ti. Jamás hubiera sido capaz de irme de no haber creído que estarias mejor sin mí.Soy demasiado egoista.Solo tú eres más importante que cualquier cosa que yo quiera...o necesite.Todo lo que yo quiero o necesito es estar contigo y sé que nunca volveré a tener fuerzas suficientes para marcharme otra vez.No soy tan fuerte como tú pareces creer,lo que estaba bien o mal había dejado de tener importancia para mi.
-Habla enserio,por favor.
-Lo estoy haciendo.¿Querrás hacerme el favor de escuchar mis palabras?¿Me dejarás que intente explicarte cuánto significas para mi?
Esperó,estudiando mi rostro mientras hablaba para asegurarse de que le estaba escuchando de verdad.
-Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte,muy oscura,pero al menos había estrellas,puntos de luz y motivaciones...Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro.De pronto,se encendió todo,todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste,cuando el meteoro desapareció por el horizonte,todo se volvió negro.No había cambiado nada,pero mis ojos habían quedado cegados por la luz.Ya no podía ver las estrellas.Y nada tenía sentido.
Quería creerle pero lo que estaba describiendo era mi vida sin él y no al revés.-Se te acostumbraran los ojos.
-Ése es justo el problema,no pueden.


Anaa (:

1 comentario: